mar, 16 abr 2013 06:06:00
Se cumple un siglo de su instalación en la Plaza de la Constitución. El Archivo Municipal ha elegido el contrato de compra venta como documento del mes de abril

En el año en el que se cumple el centenario de la instalación del último reloj histórico que da nombre al edificio y la torre de la Plaza de la Constitución, el Ayuntamiento ha puesto a punto el dispositivo electrónico que suple a la antigua maquinaria, al tiempo que se ha procedido al sellado de las esferas para evitar filtraciones de agua e instalado un nuevo equipo de amplificación del sonido. Con ello, el casco histórico recupera los toques de las campanadas que desde 1672 marcaban el ritmo diario de la villa.

Con motivo de esta efeméride, el Archivo Municipal ha seleccionado como documento del mes el contrato de compraventa del reloj, fechado el 10 de noviembre de 1912 en Valdemoro.  El texto está firmado por el titular de la empresa adjudicataria, Lorenzo Bonilla y, en representación del  Consistorio, por el entonces alcalde Casimiro Romero y el Regidor Síndico, Mariano Navarro.

El documento, que se puede consultar en valdemoro.es,  forma parte de un expediente de adquisición de bienes en el que figura también la memoria justificativa de la necesidad de instalar una nueva maquinaria en la torre de la plaza, impresos publicitarios, presupuestos y diferentes cartas dirigidas al proveedor relativas al pago y plazos de entrega.

La Torre del Reloj fue construida en 1672 sobre el edificio del pósito de trigo para labradores pobres con el fin de alojar la maquinaria que hasta entonces se ubicaba en el campanario de la iglesia parroquial. Era la mejor ubicación según el Concejo para propagar la señal acústica por el casco urbano y las tierras de labor próximas. De la importancia que tuvo en sus orígenes da cuenta la colecta vecinal con la que se pudo efectuar la primera reparación a finales del siglo XVII, dato recogido en el libro de acuerdos 1692-1695.

La Concejala de  Patrimonio y Archivo Históricos, Lourdes Almendros ha señalado que " hemos elegido como documento del mes de abril el contrato de compra-venta del reloj que en 1912 adquirió el Ayuntamiento para instalarlo en el edificio que data del siglo XVII, y que forma parte del interesante patrimonio artístico de Valdemoro. Me gustaría invitar a todas las persona que lo deseen, especialmente ahora que llega el buen tiempo, a desplazarse al municipio para descubrir su patrimonio".